Ya tengo nueva casa. Y la verdad es que está bastante bien.
Es un apartamento de 30 metros cuadrados que incluye una habitación-salón con una pequeña cocina, un hall con un armario grande y un baño separado. Aunque podéis ver las fotos, os describo un poco cómo es. Cuando entro tengo como un hall con un armario, y desde el que puedo acceder al baño y a la habitación. El baño es bastante amplio, y tiene una bañera en vez de ducha. La habitación es como un salón en el que hay un sofá que realmente es la cama. Hay una gran alfombra que engloba la zona de la cama, una mesa central -- de alta como una mesa de café -- y un escritorio. Luego, en un rincón, una cocina pequeña pero que tiene de todo: mesa para comer con dos sillas, frigo, horno, kettel, cafetera, utensilios de cocina varios y un armario escobero.
Respecto al barrio, a pesar de que está algo lejos del centro y tener que depender del transporte público, está bastante bien. A menos de un minuto andando tengo: tres supermercados, un medio centro comercial, frutería, un bar donde ponen la Champions, una cafetería pequeña, tiendas varias, peluquería, un kebap, un chino, un banco, una central de correos, etc. Si ya ando hasta unos cinco minutos tengo una avenida llena de comercios: panadería, farmacia, otro bar de fútbol, restaurantes alemanes, italianos, cafeterías, etc. La verdad es que está de lujo, no me puedo quejar.
Bueno sí, tengo una queja: el váter.
El váter es el típico alemán, que tiene como una bandeja -- o terraza -- en vez de ser profundo como el nuestro (ver el gráfico abajo). El sistema es que el meaillo o la mierdecilla se quedan en esa bandeja para que luego tires de la cadena y, de la misma forma que el Tutuki Splash de Port Aventura (ver aquí), aparece un caudal a presión que barre todo lo que hay ahí sin dejar rastro. ¡¡Qué buena idea la de estos alemanes!! puedes estar pensando. Pero no. Estos alemanes pensaron en eso porque el agua baja con más presión y arrastra todo. Sin embargo, además de tener que mear siempre sentado -- que eso es otra cosa de los alemanes --, y de que como vayas en plan churrero puede que el sistema te haga perla, no contaron con el tiempo existente entre la evacuación y el tirar de la cadena. Siendo más explícitos, no contaron con el tiempo que hay entre el momento en el que tú depositas -- llamémosle de una forma fina -- tus cristales de Swarovski en esa bandeja de plata, y el momento en el que tiras de la cadena. A lo mejor ellos están acostumbrados, pero por lo menos para mí eso es una cerdada del 15.
Pero bueno, siempre tendremos el "truco del almendruco". Hay varios trucos del almendruco en la vida, pero lo que viene a ser "el truco del almendruco del cagar" es único. Este truco surgió -- esto lo estoy improvisando -- de la máxima que todos conocemos de que "como en mi casa no cago en ningún sitio". Entonces, lo mismo en tu casa te da igual, pero cuando realizas el acto de giñar fuera de tus dominios tienes que ser cuidadoso, sobre todo si hay más personas. Entonces entra en acción el truco del almendruco. El truco consiste en que justo en el mismo momento en el que lo que viene a ser el pino queda perfectamente plantado, tiras de la cadena y aquí no ha pasado nada: ¿Tu has visto algo? Yo no. Siempre puede haber alguna pérdida o fuga de aromas, pero nada preocupante y que no pueda achacarse a una mala fosa séptica o a problemas en el sifón, así que nunca quedarás en mal lugar. Por lo tanto, optaré por utilizar el truco del almendruco -- las veces que sea necesario -- para poder disfrutar plácidamente de mis momentos de reflexión. Y todos contentos.
Es un apartamento de 30 metros cuadrados que incluye una habitación-salón con una pequeña cocina, un hall con un armario grande y un baño separado. Aunque podéis ver las fotos, os describo un poco cómo es. Cuando entro tengo como un hall con un armario, y desde el que puedo acceder al baño y a la habitación. El baño es bastante amplio, y tiene una bañera en vez de ducha. La habitación es como un salón en el que hay un sofá que realmente es la cama. Hay una gran alfombra que engloba la zona de la cama, una mesa central -- de alta como una mesa de café -- y un escritorio. Luego, en un rincón, una cocina pequeña pero que tiene de todo: mesa para comer con dos sillas, frigo, horno, kettel, cafetera, utensilios de cocina varios y un armario escobero.
Respecto al barrio, a pesar de que está algo lejos del centro y tener que depender del transporte público, está bastante bien. A menos de un minuto andando tengo: tres supermercados, un medio centro comercial, frutería, un bar donde ponen la Champions, una cafetería pequeña, tiendas varias, peluquería, un kebap, un chino, un banco, una central de correos, etc. Si ya ando hasta unos cinco minutos tengo una avenida llena de comercios: panadería, farmacia, otro bar de fútbol, restaurantes alemanes, italianos, cafeterías, etc. La verdad es que está de lujo, no me puedo quejar.
Bueno sí, tengo una queja: el váter.
El váter es el típico alemán, que tiene como una bandeja -- o terraza -- en vez de ser profundo como el nuestro (ver el gráfico abajo). El sistema es que el meaillo o la mierdecilla se quedan en esa bandeja para que luego tires de la cadena y, de la misma forma que el Tutuki Splash de Port Aventura (ver aquí), aparece un caudal a presión que barre todo lo que hay ahí sin dejar rastro. ¡¡Qué buena idea la de estos alemanes!! puedes estar pensando. Pero no. Estos alemanes pensaron en eso porque el agua baja con más presión y arrastra todo. Sin embargo, además de tener que mear siempre sentado -- que eso es otra cosa de los alemanes --, y de que como vayas en plan churrero puede que el sistema te haga perla, no contaron con el tiempo existente entre la evacuación y el tirar de la cadena. Siendo más explícitos, no contaron con el tiempo que hay entre el momento en el que tú depositas -- llamémosle de una forma fina -- tus cristales de Swarovski en esa bandeja de plata, y el momento en el que tiras de la cadena. A lo mejor ellos están acostumbrados, pero por lo menos para mí eso es una cerdada del 15.
Pero bueno, siempre tendremos el "truco del almendruco". Hay varios trucos del almendruco en la vida, pero lo que viene a ser "el truco del almendruco del cagar" es único. Este truco surgió -- esto lo estoy improvisando -- de la máxima que todos conocemos de que "como en mi casa no cago en ningún sitio". Entonces, lo mismo en tu casa te da igual, pero cuando realizas el acto de giñar fuera de tus dominios tienes que ser cuidadoso, sobre todo si hay más personas. Entonces entra en acción el truco del almendruco. El truco consiste en que justo en el mismo momento en el que lo que viene a ser el pino queda perfectamente plantado, tiras de la cadena y aquí no ha pasado nada: ¿Tu has visto algo? Yo no. Siempre puede haber alguna pérdida o fuga de aromas, pero nada preocupante y que no pueda achacarse a una mala fosa séptica o a problemas en el sifón, así que nunca quedarás en mal lugar. Por lo tanto, optaré por utilizar el truco del almendruco -- las veces que sea necesario -- para poder disfrutar plácidamente de mis momentos de reflexión. Y todos contentos.
Gasta agua ahí sin miedo!!! Recuerda que ya no vives en el desierto!!!
ResponderEliminarTiene muy buena pinta la casa, parece bastante luminosa, a ver si el barrio tiene vidilla y pronto te conoces los mejores sitios para salir!!!
Ya podemos decir que acaba de inaugurar la Pensión El Tío los Pollos!!!
Me encanta la pensión del TIO DE LOS POLLOS, lo del tema del cagar, me lo teneís que explicar mejor cuando vaya, tengo que verlo pa entenderlo, jejejej, soy un poco corta,... veremos a ver si me tiro los 10 días sin ir al WC,besosssssssss, que la disfrutes!!! Evelina.
ResponderEliminarJajajaa ya ves, doy fe de los váteres alemanes! Lo comprobé la primera vez que estuve allí hará más de dos años en Berlín, y no veas el pestazo que se liaba entre que "depositas" y tiras de la cadena xDDDD
ResponderEliminarPues para qué está el truco del almendruco??? para evitar pestazos.
ResponderEliminarY es que es verdad, es una cerdada a la que nosotros no estamos acostumbrados :-(
La casa se ve muy chula y lo de las reservas veo que lo llevas bien. ¡Menudo negocio te has montao con La Pensión el Tío los Pollos!
ResponderEliminarsi cobrara, aunque fuese en canne...
ResponderEliminarUna ventajilla que tiene ese váter es que para hacerte un análisis de la caca no necesitas el jarro. Yo tengo experiencia, a partir de los 50 es anual.
ResponderEliminarya, pero ahora no es momento de análisis de caca :-(
ResponderEliminaresos wc lo tenia mi bisabuela en su casa...una gozada ver tu mojon bañandose...solo le faltaba las mamachicho al lao
ResponderEliminarmi nuevo vecino dice que ellos los llaman "el váter con repetición de la jugada" XD Es la mejor definición.
ResponderEliminarPor cierto, para los que dejan comentarios sin nombre... la informática ha avanzado, pero no tanto como para adivinar quién eres